Centro Cultural Casa de Artigas - Biblioteca - Museo Histórico
La ciudad de Sauce se desarrolló en torno a lo que fue el casco de estancia de los Artigas, motivo por el cual la construcción quedó emplazada en el centro de la planta urbana. La estancia fue propiedad de la familia a través de varias generaciones. Lo que hoy conocemos como “Casa de los Artigas” se declaró MHN el 10 de junio de 1975 por Resolución/Ley 969/975.
La infancia y la adolescencia de José Artigas transcurrieron en la zona de Sauce, donde adquirió un conocimiento profundo de las tareas y costumbres del medio rural, ámbito en el cual se desenvolvía con familiaridad y destreza.
En 1737 llega a Montevideo con el regimiento de la Cantabria un soldado aragonés, Felipe Santiago Pascual Aznar. Se casó con una canaria, María Rodríguez Camejo, viuda que había llegado con el segundo grupo de pobladores a Montevideo.
El 26 de noviembre de 1746 el Cabildo de Montevideo con Real Cédula de 1749 le otorga a Felipe Pascual, abuelo materno del prócer, una suerte de estancia de la que no tomó posesión sino hasta años más tarde. El terreno, ubicado a la altura del cauce medio del arroyo Sauce Solo, medía 2.583 ha. de superficie.
Durante largos años la familia Pascual mantuvo su residencia en Montevideo. Con frecuencia Don Felipe cabalgaba horas para cuidar del establecimiento y darle instrucciones a los cinco esclavos que dejó a su cargo. Había declarado poseer 180 cabezas de ganado vacuno en el predio y se dedicaba principalmente a la explotación lechera. Casi todo lo obtenido de las vacas tamberas que los esclavos ordeñaban a diario era destinado a la elaboración de quesos. La producción agrícola, menos importante que le lechera, consistía en el cultivo de una huerta y parcelas de trigo y maíz.
Cuando en 1773 muere Felipe Pascual su yerno Martín José Artigas queda a cargo de la estancia, que hasta ese momento contaba con tres humildes edificaciones de techo de paja. Únicamente el local dedicado a la quesería tenía paredes de piedra, los otros dos, el galpón y la cocina, eran de totora. Por iniciativa de Don Martín entre 1780 y 1782 quedó construida la casa de azotea.
La edificación, muy semejante a la que se puede observar hoy, consistía en dos piezas con paredes de piedras unidas entre sí con barro y techos a la porteña ensamblados con tirantes de madera. A modo de protección estaba rodeada por un muro de piedra de escasa altura.
En 1836, luego del fallecimiento de los progenitores, la estancia se vende al albacea testamentario de la familia Artigas, el español Vicente Ponce de León. El nuevo dueño fracciona el terreno para vender los solares que eventualmente dieron origen al núcleo fundador de la localidad de Sauce. Con la finalidad de levantar una capilla, le donó a la Iglesia Católica la manzana en la que estaba emplazado el casco de estancia construido por los Artigas. Cedió también los predios para la plaza y el cementerio.
En los primeros años de la década de 1920 la Iglesia Católica le donó al Estado el predio que ocupaban los restos del casco de la antigua estancia. Para su reconstrucción, que comenzó en 1925, se utilizaron piedras originales, algunas de las cuales siguen formando parte del muro que se encuentra al fondo. El Consejo Nacional de Administración obtuvo la autorización para invertir en la obra hasta 4.500 pesos. Fue inaugurada el 19 de junio de 1927, luego de dos años de trabajo.
El Museo Histórico de Sauce fue fundado el 3 de noviembre de 1984. Se puede visitar de lunes a viernes entre las 10:15 y las 19:00 horas y los sábados y domingos desde las 10:30 hasta las 17:30.
Fuentes:
Barrios Pintos, Aníbal. 1981 Canelones. Su proyección en la historia nacional. Intendencia Municipal de Canelones. Uruguay. Tomo II.
CLAEH y UNESCO
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Dirección
Avda. Gral. Jose Gervasio Artigas